Es penoso el leer este tipo de artículos que son como un manual del argumentario de los anti- Colau y que parece proporcionado por los poderes financieros (me refiero al manual). En el párrafo que reproduzco se resume toda la farsa y la confusión que se pretende expandir en la opinión pública:
“Hoy, esta realidad ha superado con creces aquella ficción, y el follón que se ha organizado por los impagos, los desahucios y la ruina de inmobiliarias y constructoras lastra la economía y la imagen del país. Sin embargo, si bien es cierto que los bancos se comportaron como unos irresponsables concediendo créditos hipotecarios a troche y moche y, en otras muchas ocasiones, como usureros, sembrando de cláusulas abusivas las escrituras de dichos créditos, hay que reconocer que los compradores nos empeñamos hasta las cejas creyendo que el ladrillo que comprábamos a dos pesetas lo íbamos a poder vender en el futuro a dos mil euros”.
Los sujetos que participan son: Bancos, Promotores Constructoras y ciudadanos (faltan los poderes públicos- Banco de España), pues bien, el ciudadano comprador que no puede pagar las hipotecas es el 3% del total de las hipotecas y estos son el blanco de las criticas de todos estos analistas políticos y de los que criminalizan a Ada Colau, estos morosos “no son inocentes”, luego son culpables y que se ¡jodan! (con perdon). Los promotores y constructoras han tenido posibilidad de dación en pago o importantes quitas a través de los concursos de acreedores y el ciudadano con la vivienda que habita y cuyos impagos suponen el 3% del total, al ¡carajo! que es culpable, no se tiene en cuenta la imposibilidad sobrevenida por la perdida brutal de empleo y los momentos excepcionales que se viven, no importa siguen siendo los responsables de todo y en esta situación excepcional solo podemos ayudar al pilar del sistema a la sangre del organismo, al sistema financiero.
Otro lamentable argumento que expone la articulista dice algo así:
“Había personas que pensaron que comprando pisos, dándoles una manita de pintura y revendiéndolos un 20% más caro, podían asegurarse una vejez millonaria”
Nunca la plataforma Stop desahucios ha defendido estos casos y ni la dación en pago para ellos, ni otra medida que se pretenda por parte de estos colectivos va por ahí. Es la estrategia es la de la confusión, la de mezclarlo todo.
Como colofón del lugar común de todos los detractores de las ayudas a los impagos de hipotecas y de desahucios está esta teoría:
“(…) una manera de asegurar a nuestros hijos un futuro sin posibilidad de adquirir una vivienda en propiedad.
El valor de las viviendas está bajando y lo que si puede ocurrir es que el tipo de interés de las futuras hipotecas suba, pues muy lógico, se vuelve a lo que ocurría hace 20 años, yo me hipotequé a un interés del 16% (si al 16% ) pero el precio de la vivienda era barato. Coño (con perdón) preocúpense porque haya trabajo para nuestros hijos que ya vendrán las hipotecas, pero decir que estamos poniendo los cimientos para que nuestros hijos no puedan hipotecarse es es es es ……….ridículo.
Publicado por Carlos Saavedrahttp://www.elsemanaldigital.com/blog.asp?idarticulo=128516&cod_aut=
“Hoy, esta realidad ha superado con creces aquella ficción, y el follón que se ha organizado por los impagos, los desahucios y la ruina de inmobiliarias y constructoras lastra la economía y la imagen del país. Sin embargo, si bien es cierto que los bancos se comportaron como unos irresponsables concediendo créditos hipotecarios a troche y moche y, en otras muchas ocasiones, como usureros, sembrando de cláusulas abusivas las escrituras de dichos créditos, hay que reconocer que los compradores nos empeñamos hasta las cejas creyendo que el ladrillo que comprábamos a dos pesetas lo íbamos a poder vender en el futuro a dos mil euros”.
Los sujetos que participan son: Bancos, Promotores Constructoras y ciudadanos (faltan los poderes públicos- Banco de España), pues bien, el ciudadano comprador que no puede pagar las hipotecas es el 3% del total de las hipotecas y estos son el blanco de las criticas de todos estos analistas políticos y de los que criminalizan a Ada Colau, estos morosos “no son inocentes”, luego son culpables y que se ¡jodan! (con perdon). Los promotores y constructoras han tenido posibilidad de dación en pago o importantes quitas a través de los concursos de acreedores y el ciudadano con la vivienda que habita y cuyos impagos suponen el 3% del total, al ¡carajo! que es culpable, no se tiene en cuenta la imposibilidad sobrevenida por la perdida brutal de empleo y los momentos excepcionales que se viven, no importa siguen siendo los responsables de todo y en esta situación excepcional solo podemos ayudar al pilar del sistema a la sangre del organismo, al sistema financiero.
Otro lamentable argumento que expone la articulista dice algo así:
“Había personas que pensaron que comprando pisos, dándoles una manita de pintura y revendiéndolos un 20% más caro, podían asegurarse una vejez millonaria”
Nunca la plataforma Stop desahucios ha defendido estos casos y ni la dación en pago para ellos, ni otra medida que se pretenda por parte de estos colectivos va por ahí. Es la estrategia es la de la confusión, la de mezclarlo todo.
Como colofón del lugar común de todos los detractores de las ayudas a los impagos de hipotecas y de desahucios está esta teoría:
“(…) una manera de asegurar a nuestros hijos un futuro sin posibilidad de adquirir una vivienda en propiedad.
El valor de las viviendas está bajando y lo que si puede ocurrir es que el tipo de interés de las futuras hipotecas suba, pues muy lógico, se vuelve a lo que ocurría hace 20 años, yo me hipotequé a un interés del 16% (si al 16% ) pero el precio de la vivienda era barato. Coño (con perdón) preocúpense porque haya trabajo para nuestros hijos que ya vendrán las hipotecas, pero decir que estamos poniendo los cimientos para que nuestros hijos no puedan hipotecarse es es es es ……….ridículo.
Publicado por Carlos Saavedrahttp://www.elsemanaldigital.com/blog.asp?idarticulo=128516&cod_aut=
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